Para ayudar a detectar un correo falso que simula provenir de una entidad bancaria, financiera, red social o cualquier otra fuente requiriendo datos del usuario, te pasamos algunos aspectos que hay que tener en cuenta para identificar la veracidad de un correo:
- Dirección del remitente: prestar especial atención a la dirección que aparece como remitente. Debe recordarse que la dirección de un e-mail falso puede parecer legítima.
- Forma del saludo: muchos mensajes falsos comienzan con saludos genéricos sin personalización hacia un usuario determinado.
- Urgencia y/o amenaza: este es uno de los elementos más importantes, ya que generalmente este tipo de correos se aprovecha del temor para lograr sus propósitos. Estos mensajes falsos suelen comunicar la necesidad urgente de actualizar y ampliar los datos del usuario. La mayoría amenazan con la discontinuidad o inhabilitación de un servicio específico.
- Hay que recordar que las empresas nunca solicitan datos sensibles por correo electrónico. Cuando llega un correo que solicita información como nombre de usuario, clave, número de tarjeta de crédito o cuenta, es probable que sea un mensaje falso.
- Enlaces en el cuerpo del correo: en la mayoría de los casos se incluyen enlaces con apariencia legítima, pero que llevan a sitios falsos. Revisar la URL del sitio citada en el correo y comprobar que es la empresa a la que se refiere. Para estar seguro de que se ingresa a un sitio legítimo, comprobar que la URL que aparece en la barra de direcciones sea igual a la utilizada habitualmente.
- Mala redacción: Cuando un correo presenta graves faltas de ortografía o expresiones que no son habituales, es una señal bastante certera de que ese mensaje es fraudulento.
Detectar un correo falso es una muy buena forma de evitar y prevenir ataques informáticos en la empresa.